La industria taiwanesa da nuevos pasos en el campo de la fabricación inteligente

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Desde que el conflicto comercial entre Estados Unidos y China comenzó a recrudecerse y se impusieron nuevos y severos aranceles a los productos manufacturados en este país, las empresas del sector industrial afincadas en el país decidieron cambiar de enfoque y trasladarse a otras ubicaciones. Al mismo tiempo, y aprovechando este impulso de cambio, las industrias taiwanesas decidieron avanzar en el campo de la fabricación inteligente, modernizando sus procesos con nuevas tecnologías.

Este proceso está evolucionando y, según informan desde el Instituto de Investigación de Tecnología Industrial (ITRI), patrocinado por el gobierno, las empresas están avanzando en sus estrategias de automatización para dar nuevos pasos. Según acaban de anunciar en un reciente comunicado, van a comenzar a abordar los campos más vanguardistas en el ámbito de la fabricación inteligente, abarcando desde la producción experimental de componentes tecnológicos a la verificación automatizada de soluciones de fabricación inteligente.

Esto se hará a aprtir del trabajo realizado en el Parque Tecnológico de Innovación de Maquinaria de Precisión de Taichung, que comenzó a operar en 2018 y que ahora se encuentra en posición de proporcionar una ayuda invaluable para adoptar la fabricación inteligente en las industrias más importantes del país. Estas instalaciones se encuentran en condiciones de proporcionar a las empresas taiwanesas todo tipo de maquinaria, herramientas, software y equipos de automatización desarrollados pensando especialmente en las necesidades de las empresas del país.

Y no sol se trata de las grandes empresas, sino que el enfoque de este centro es apoyar en especial a las pequeñas y medianas empresas que, como ocurre en muchos otros países, representan la mayor fuerza de innovación en casi todos los campos de la tecnología. Como explican desde el IMTC, ahora las empresas tecnológicas taiwanesas podrán disfrutar de un impulso en sus iniciativas anteriores de implementación de la fabricación inteligente, lo que les permitirá aumentar su eficiencia y su competitividad en un sector donde la innovación y la evolución tecnológica son la base del éxito presente y futuro.

Además, detallan que esta ayuda contribuirá a establecer nuevas fábricas inteligentes, abarcando desde la planificación al desarrollo de equipos y la integración de sistemas. Y esto se extenderá a todos los sectores productivos, desde la fabricación de placas base y memoria a la de calzado o la alimentaria, tanto dentro como fuera del país, ya que muchas de estas empresas están trasladando sus antiguas operaciones en China hasta otras localizaciones en Taiwán, Vietnam, Malasia y otros países del sudeste asiático.