El gasto realizado a través de monederos digitales seguirá creciendo hasta 2025

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El dinero en efectivo va a ir desapareciendo paulatinamente en favor del dinero digital, una forma de economía personal intangible pero muy versátil, que permite a las personas pagar tanto en comercios físicos como a través de Internet. Se trata de la evolución natural de otras formas de pago sin efectivo tradicionales, como tarjetas de débito o crédito, pero con un enfoque digital y multiplataforma, que proporciona formas más fáciles de pagar las compras en cualquier tipo de comercio o plataforma.

En los últimos años ha ido desarrollándose el ecosistema de pago digital, pero quizá el mayor impulso se ha producido a raíz de la pandemia y el consiguiente confinamiento, cuando los consumidores se han visto obligados a realizar más compras online. Al mismo tiempo, los comercios, tanto físicos como online, han apostado por estas nuevas formas de pago digital, como los monederos digitales, que permiten eliminar la fricción que generan otros sistemas tradicionales.

Según la última investigación de Juniper Research, el año pasado el gasto realizado a través de monederos digitales alcanzó los 5,5 trillones de dólares, después de un crecimiento meteórico impulsado por la pandemia. Y pronostican que en los próximos cinco años este volumen aumentará un 83%, pudiendo superar los 10 trillones para el año 2025. Esto se ha logrado gracias a las ventajas que proporcionan los monederos digitales, que permiten gestionar todos los datos a través de una sola aplicación, de forma sencilla y segura.

Los expertos destacan, además, que estas plataformas son cada vez más capaces de realizar pagos remotos y sin contacto, lo que impulsará su uso en los próximos años. En su opinión, los pagos sin contacto y en comercios electrónicos representarán el 50% del gasto total a través de monederos digitales para 2025, un aumento considerable desde el 36% registrado en 2020. Y no han mucho margen de duda sobre el progreso de estos medios de pago modernos, ya que los consumidores están ejerciendo una gran presión, al adoptar masivamente estas tecnologías, y los comerciantes solo deben decidir cuáles son los monederos más adecuados a implementar en sus negocios.

Para Alexandria Sadler, coautora de esta investigación, “los comerciantes deben basar sus estrategias de pago en la aceptación de la billetera para respaldar un mercado direccionable comprometido digitalmente, pero también deben juzgar las billeteras correctas a las que apuntar, o se enfrentarán a mayores costos y beneficios limitados”.

Finalmente, los investigadores destacan que el mayor impulsor del gasto a través de monederos digitales es el crecimiento de los magos móviles sin contacto. Sus previsiones son que la adopción de tecnologías contactless progresará con la implementación y configuración de estos sistemas en los smartphones. Pronostican que entre 2020 y 2025 se pasará de un 11% de móviles habilitados para estos usos a un 34%, lo que ayudará a que siga progresando la nueva economía digital.