La digitalización y los trabajadores conectados impulsan la realidad aumentada industrial

Según ABI Research, el mercado industrial acelerará la adopción de gafas inteligentes y dispositivos móviles de realidad aumentada (RA), generando un valor de 70.000 millones de dólares para 2025.

“COVID-19 no creó la necesidad de una digitalización, pero ciertamente la aceleró”, dice Eric Abbruzzese, Director de Investigación de Realidad Virtual y Aumentada de ABI Research. “Como elemento de alto valor en la digitalización, la realidad aumentada agrega un elemento visual a un sistema con muchos datos que a veces puede devaluar al trabajador, de modo que RA vuelve a ponerlo en la ecuación mediante la creación de una relación sinérgica entre el humano y los sistemas de TI / OT".

Esa sinergia es responsable de la impresionante tasa de crecimiento de la RA en la industria. ABI Research estima que más de 15 millones de dispositivos de gafas inteligentes se utilizarán en los flujos de trabajo industriales que se encuentran en la fabricación, transporte / automoción, AEC, energía y servicios públicos y logística. Empresas como Atheer, Librestream, PTC, ScopeAR y Teamviewer aprovechan las fortalezas de sus plataformas en RA para integrar y entregar aplicaciones de alto valor, como asistencia remota, capacitación y captura de conocimiento. Y es que, aunque gran parte del uso de RA hoy se realiza en dispositivos móviles, las gafas inteligentes desempeñan un papel fundamental al permitir el acceso a datos con las manos libres. 

Los indicadores clave de rendimiento (KPI) para la industria resaltan aún más los beneficios de RA. El tiempo de inactividad es uno de los KPI más severos en términos de pérdida de productividad e ingresos. En la industria automotriz, por ejemplo, es posible que se pierdan 30.000 dólares por minuto de tiempo de inactividad no planificado; los grandes fabricantes de automóviles pueden producir un promedio de un vehículo por minuto. RA puede ayudar a reducir el tiempo de inactividad no planificado mediante un mantenimiento más eficiente gracias al análisis, la orientación y la verificación de tareas para reducir errores, así como a la aplicación de experiencia remota cuando sea necesario. 

Los entornos industriales crean, pues, la tormenta perfecta de variables y necesidades de realidad aumentada. “La alta complejidad conduce a un tiempo de inactividad severo e ineficiencia de costes que RA puede disminuir. La capacitación y el intercambio de conocimientos son fundamentales debido a esa complejidad, y RA puede mejorar la eficacia y la retención de la capacitación al mismo tiempo que se utiliza para capturar, compartir y ver ese conocimiento. La integración en plataformas importantes como IoT, PLM, ERP y WMS permite un beneficio bidireccional, donde RA puede mejorar esos sistemas según estos alimentan los datos que hacen mejor a la tecnología. Todos estos componentes trabajando juntos suponen un desafío pero, si se supera el reto, el rendimiento crece exponencialmente ”, concluye Abbruzzese.