La gestión de los datos en las empresas sigue siendo deficiente

  • Gestión del dato

Para avanzar en la transformación digital es fundamental realizar una buena gestión de la información, pero la mayoría de las empresas falla en este aspecto, ya que actualmente más del 50% de sus datos están sin clasificar. Esto limita la visibilidad de la información e impide que las empresas puedan extraer el valor de datos potencialmente críticos para su negocio.

Un reciente estudio elaborado por Vanson Bourne para veritas revela que 52% de los datos que guardan las empresas se puede considerar “dark data”, es decir, que se encuentra sin clasificar o etiquetar, por lo que es muy complicado extraer la información valiosa que contienen. Esto da una medida de hasta qué punto están mal enfocadas las estrategias de digitalización de muchas organizaciones, que no han mejorado la gestión de datos antes de embarcarse en otras fases de la transformación digital.

Esto es un problema por varios motivos. Por un lado, tener esta información sin clasificar impide conocer la verdadera naturaleza de la información, lo que resulta en una importante pérdida de valor para los negocios. Pero, además, puede plantear numerosos problemas en cuanto al cumplimiento normativo, ya que muchos datos sensibles podrían estar fuera de las estrategias de gobernanza que protegen la información sujeta a las leyes de protección de datos.

Otro problema potencial de extrema gravedad es que, al estar sin clasificar, esta información puede acabar en repositorios de baja seguridad, lo que los convierte en un objetivo importante para los ciberdelincuentes, que intuyen muchas oportunidades de infiltrarse y robar datos valiosos.

Para combatir estos riesgos potenciales las organizaciones están empezando a implementar sistemas más eficaces para analizar y clasificar los datos, que permiten detectar y etiquetar la información sujeta a las regulaciones de protección de datos, así como todos aquellos datos que son valiosos para los negocios. Pero la clave para tener éxito en esta estrategia aplicar estas políticas a todas las fuentes de información y todos los almacenes de datos, independientemente de dónde se encuentren los datos, o de dónde provengan.

En este estudio se muestra que solo el 5% de las compañías han clasificado todos sus datos alojados en la nube pública, y solo el 6% ha hecho lo propio en los dispositivos móviles empleados en el trabajo. Un 61% reconoce que han clasificado menos de la mitad de la información que tienen en la nube pública y un 67% ha hecho lo propio con menos de la mitad de los datos que tienen en los dispositivos móviles. Una de las raíces de este problema se encuentra en la percepción errónea que tienen los directivos de las organizaciones sobre las políticas de protección de datos, la privacidad y el cumplimiento normativo son responsabilidad de los proveedores de la nube, y no de la empresa.

Pero se está estableciendo una tendencia de cambio en muchas organizaciones, que se están dando cuenta de las serias implicaciones de seguir con las estrategias clásicas de gestión de datos. Los expertos afirman que más están cambiando sus prioridades para fortalecer la seguridad de los datos (68%), mejorar la visibilidad (39%) y garantizar el cumplimiento normativo (32%). El camino a recorrer es largo, ya que la mayoría aún no ha dado pasos significativos para mejorar en estos aspectos, pero en los próximos años las organizaciones van a dar un importante paso adelante para afianzar el control de toda la información, lo que mejorará su eficacia al aplicar modelos de negocio basados en datos, la protección de los mismo y, por consiguiente, su reputación como empresa.