Los españoles exigen más transparencia sobre el uso de sus datos

  • Gestión del dato

A medida que progresa la concienciación digital entre la sociedad aumenta la preocupación de las personas por cómo las empresas utilizan los datos que recopilan. Una investigación revela que el 76% de los españoles demanda una mayor transparencia sobre el uso de sus datos, ya que en la mayoría de los casos desconocen completamente para qué los usan, a pesar de que se les exige compartir su información para el uso de aplicaciones y servicios, lo que está generando una gran desconfianza.

Recomendados: 

Nueve formas prácticas de optimizar tus costes IT Leer

Data cloud inteligente, clave para tu transformación digital Informe

Infome de pruebas:
VMware Work from home Documento

La preocupación por la privacidad digital está aumentando entre los españoles, que ven cómo las empresas recopilan sus datos como condición indispensable para el uso de aplicaciones y la prestación de servicios digitales. En el estudio anual Consumer Privacy Survey, realizado por Cisco, queda claro que los ciudadanos españoles están cada vez más preocupados por cómo las empresas utilizan sus datos. El dato más relevante que arroja esta investigación es que el 76% de los consumidores encuestados demanda una mayor transparencia sobre el uso de sus datos.

La desconfianza está en aumento, ya que un 56% de las personas entrevistadas cree que sus datos no están bien protegidos por parte de las empresas. Ocho de cada diez encuestados lo atribuye a esta gran complejidad para conocer cómo se usan y protegen, un 57% no ve con buenos ojos la imposición de recopilar los datos personales para poder usar las aplicaciones y servicios digitales, y un 54% no confía en las políticas de las empresas en torno al uso de datos.

Los investigadores de Cisco comentan que las empresas pueden llevar a cabo distintas acciones para ofrecer a los clientes la transparencia que demandad y ganarse su confianza. Entre ellas, destacan el cumplimiento con las normativas de privacidad, esforzarse más para evitar las filtraciones de datos personales, facilitar la configuración de opciones y ofrecer una información más clara sobre el uso que hacen con la información que recopilan.

Uno de los focos principales de desconfianza está en la inteligencia artificial, una tecnología que es muy opaca en cuanto al uso de los datos, y que tiene tendencia a verse condicionada por el sesgo en el tratamiento de la información. La encuesta revela que un 45% de los españoles cree que los beneficios potenciales de la Ia superan a los riesgos, y un 61% se muestra dispuesto a compartir datos personales anónimos para ayudar a mejorar los productos y servicios y la toma de decisiones comerciales.

Pero los expertos señalan que existe una gran desconexión entre los consumidores y las empresas. Un 71% de estas considera que la toma de decisiones automatizada mediante IA se realiza de forma transparente, pero un 73% de las personas se muestra preocupada por cómo se usan sus datos para alimentar a la IA. Este clima enrarecido está llevando a las personas a tomar acciones para proteger mejor sus datos ante la falta de transparencia de las organizaciones. Así, un 21% de los españoles ha realizado alguna consulta sobre el uso de sus datos, y un 35% ha cambiado de proveedor como respuesta a las malas prácticas de ciertas empresas.

Por otro lado, el 44% de los entrevistados en España afirma que lee los documentos sobre el consentimiento de privacidad, la mitad gestionan la configuración de las cookies en los sitios web antes de aceptarlas, y un 41% de quienes utilizan un dispositivo inteligente basado en la voz dentro de su hogar lo desactivan regularmente para proteger su privacidad.

Ante la creciente percepción de riesgo para su privacidad, un 39% de los españoles cree que el gobierno debería convertirse en garante de la protección de datos de los ciudadanos. Un71% ve como algo positivo la introducción del reglamento GDPR, pero solo el 28% conoce la normativa. Un dato interesante es que, a pesar de que la mayoría de personas cree que almacenar los datos en España ayudaría a la correcta aplicación de esta ley, el 47% de los encuestados rechazaría esta medida si encareciese sus productos o servicios.