La IA podría ser la tecnología con mayor impacto económico de todos los tiempos
- Inteligencia Artificial
La Inteligencia Artificial tiene un gran potencial para contribuir al crecimiento de la economía mundial, si bien, independientemente de las diferencias entre países, empresas y trabajadores, es necesario cierto nivel de gestión para maximizar los beneficios.
Esto se desprende de un reciente informe de McKinsey Global Institute para simular el impacto de la IA a nivel mundial. Tal y como refleja el estudio, la IA provocará unos cambios sin precedentes en la forma en la que las personas viven y trabajan, y la mayor parte del impacto en la economía está por llegar.
En primer lugar, han tratado de comprender cómo están cambiando las dinámicas en las empresas de diferentes sectores para desarrollar la base sobre la que integrar y desarrollar tecnologías de IA. En segundo lugar, han querido ver las disrupciones que pueden darse en países, compañías y trabajadores en la transición hacia este despliegue de IA. Según la firma, es probable que existan costes en esta evolución que deben ser tenidos en cuenta y estimados en el proceso. El análisis repasa cómo las pérdidas y ganancias económicas de empresas, empleados y países, y cómo esta distribución puede obstaculizar la consecución de posibles beneficios de la IA. En tercer lugar, el informe analiza la dinámica de la IA en un rango de países diferentes, agrupados en función de características similares, con la idea de mostrar una visión global del impacto de la IA.
Ayúdanos a conocer cuáles son las tendencias tecnológicas que se impondrán en la empresa el próximo año y más allá, y cómo se está construyendo el futuro digital.
De este análisis se extraen dos conclusiones básicas: existe un gran potencial de impacto de la IA en la economía mundial, y, segundo, el principal reto es que la adopción de la IA puede ampliar las diferencias entre países, empresas y trabajadores.
Otras conclusiones que se pueden obtener de este informe son que la simulación muestra que en 2030 en torno al 70 por ciento de las empresas pueden haber adoptado al menos algo de tecnología de IA, y que casi la mitad de éstas habrían integrado las cinco categorías que refleja la firma en el análisis: visión computacional, lenguaje natural, asistentes virtuales, automatización de procesos robóticos y aprendizaje de máquinas avanzado; que el impacto adicional en la economía podría situarse en 13 billones de dólares a finales de la década de los veinte, lo que supondría un incremento acumulado del 16% en el PIB, aproximadamente un 1,2% anual, lo que superaría el impacto que cualquier otra tecnología haya podido tener en la historia.