Evitando riesgos de ciberseguridad desde el puesto de trabajo

Fuga de datos, pérdida de información confidencial, infecciones por malware, deslices en el uso del correo electrónico o las redes sociales… Son muchos los riesgos a los que se expone la empresa contemporánea en el marco de un puesto de trabajo móvil. En este contexto, es fundamental que el empleado esté formado en ciberseguridad, máxime ahora, cuando sabemos que España se ha colocado en un significativo séptimo puesto mundial en el ranking de países más golpeados por los ataques de ransomware. 

 

Por tanto, no está de más recordar que:

• Un antivirus es necesario porque proporciona un mínimo nivel de seguridad.

• Hay aplicaciones que permiten deshacer el formateo de una unidad de memoria.

• Existen métodos para recuperar los datos de los discos que han sido sobreescritos.

• La virtualización y la multitud de recursos compartidos hacen que hoy la seguridad sea más compleja.

• Ha incrementado la efectividad de la ingeniería social para engañar a los usuarios con prácticas como el phishing.

 

Un panorama que no debe asustar ni al empleado ni al empresario, pero sí concienciarlos de que hay que trabajar juntos en la comprensión y puesta a punto de una serie de prácticas para proteger los proyectos.

 

Éstas son las 5 fundamentales:

1. Asegurar una conectividad confiable.

2. Contar con filtrado de contenidos, visibilidad de las aplicaciones y configuración del tráfico.

3. Implementar soluciones robustas de autenticación.

4. Promover una cultura de ciberseguridad en la organización.

5. Tener en cuenta el error humano.