Ideas erróneas sobre los nuevos coches inteligentes

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Un reciente estudio revela que la mayoría de personas tiene unas ideas muy equivocadas sobre los que son y lo que realmente pueden ofrecer a los conductores los coches conectados e ?inteligentes?. Por ejemplo, el 70% de ellos creen que ya se pueden adquirir coches totalmente autónomos, y un porcentaje alarmante confunde el significado de tecnologías como el control de velocidad o la conducción asistida.

El estudio ha sido elaborado por Opinion Matters y fue encargado por la consultora Thatcham Research, especializada en el sector de la automoción, en colaboración con Euro NCAP y Global NCAP. Recoge la opinión de 1.567 conductores de Alemania, Francia, Italia, España, Reino Unido, China y Estados Unidos, y muestra que la mayoría de ellos tienen ideas erróneas acerca de las auténticas capacidades de los actuales vehículos conectados. Esto es mucho más que una simple falta de conocimiento, ya que un mal uso de ellas puede provocar accidentes y otros problemas circulatorios. Como ejemplo más sorprendente y a la vez peligrosos, un 70% de los conductores de todo el mundo cree que ya pueden adquirir coches autónomos, capaces de conducir por sí solos.

Por otro lado, el estudio reveló que el 10% de los encuestados se sentirían tentados de echar una siesta mientras usan funciones avanzadas como la conducción asistida o el control de crucero, y el 34% usaría el teléfono móvil mientras tuviera activados estos mecanismos. Semejante confusión puede parecer casi una broma, pero la realidad es que muchas personas confunden el verdadero significado de estas herramientas de ayuda a la conducción. Como colofón a este sinsentido, casi la mitad de los conductores no se considerarían responsables en caso de sufrir un accidente al emplear la conducción asistida, cometiendo el grave error de asociarla a una supuesta capacidad de los coches de conducirse solos.

Según el director de investigación de Thatcham, Matthew Avery, esto tiene mucho que ver con los reclamos publicitarios de marcas como Audi, BMW o Tesla, que no son lo suficientemente claros a la hora de explicar la verdadera naturaleza de estas tecnologías. A este respecto afirmó que: “algunos fabricantes de automóviles están diseñando y comercializando vehículos de tal manera que los conductores creen que pueden renunciar al control. Los fabricantes de automóviles quieren obtener una ventaja competitiva al referirse a la capacidad de auto-conducción o conducción semi-autónoma en su comercialización, pero esto está alimentando la confusión del consumidor. Esto se ve agravado por algunos sistemas que hacen demasiado por el conductor, que termina desconectado” de su papel en la carretera.

Quiso recalcar que su mensaje: “es que la tecnología de hoy es compatible con el conductor. No es una conducción automatizada y no se debe confiar en ella a expensas de la atención del conductor. Este tiene el control y siempre debe permanecer alerta”. También quiso señalar que: “si se usan correctamente, los sistemas de asistencia en carretera mejorarán la seguridad vial y reducirán las muertes, pero no lo harán si su nomenclatura y el marketing convencen a los conductores de que el coche puede cuidarse solo”.

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Como ejemplo de un eslogan ambiguo que puede llevar a confusión, citó un anuncio de la marca Audi, que dice: "El nuevo Audi A6 está desarrollado para dar un paso hacia la era de la conducción autónoma, gracias al piloto de garaje Audi AI y al piloto de estacionamiento Audi AI”. Y otro de la marca Mercedes, que dice: “la Clase C es capaz de conducir de manera semiautónoma en ciertas situaciones”. También señaló a Tesla, cuyos vehículos se ha visto involucrados recientemente en una serie de accidentes mortales en los que las autoridades creen que los conductores s desentendieron mientras usaban el sistema de conducción asistida. En este caso se refirió al eslogan de la marca que dice: “Todos los vehículos Tesla producidos en nuestra fábrica, incluido el Modelo 3, tienen el hardware necesario para capacidad total de auto conducción a un nivel de seguridad sustancialmente mayor que el de un conductor humano”.

En opinión de Avery, “La falta de capacitación de conductores y controles, símbolos y nombres estandarizados para estas características está enturbiando aún más las aguas para los consumidores”. Por su parte, Euro NCAP ha dicho públicamente que ningún automóvil actual ofrece plena autonomía y que los conductores siguen siendo totalmente responsables de la conducción segura, independientemente de que usen o no tecnologías de ayuda a la conducción. Y recalcó que estos sistemas no se deben considerar en ningún caso como una alternativa a la conducción segura y controlada. En palabras del Secretario General de esta entidad, Michiel van Ratingen: “el mensaje de estas pruebas de Euro NCAP es claro: los coches, incluso aquellos con sistemas avanzados de asistencia al conductor, necesitan un conductor atento detrás del volante en todo momento. Es imperativo que los sistemas de seguridad activos y pasivos de vanguardia permanezcan disponibles en segundo plano como respaldo vital de seguridad”.