La inteligencia artificial se vuelve imprescindible para responder a las ciberamenazas
- Seguridad
Esto es lo que opina la mayor parte de las empresas, que ven en la IA la única forma de ser efectivos en materia de seguridad, a la luz de lo mucho que están avanzando las estrategias de los ciberdelincuentes. Esta tecnología les brinda mejores opciones para abordar los retos que impone el crecimiento de la nube y las intefaces digitales para el usuario final.
La última investigación del instituto Capgemini sobre el panorama de la seguridad informática revela que el 69% de las organizaciones no cree que pueda enfrentarse a las crecientes amenazas de ciberseguridad sin la ayuda de la inteligencia artificial. Con el crecimiento de los servicios en la nube, el aumento del número de dispositivos para el usuario final y la mayor complejidad de las interfaces de usuario y las redes de datos, la IA se presenta como la mejor forma de abordar la seguridad de forma proactiva.
Teniendo en cuenta la sofisticación que están alcanzando los ciberdelincuentes, las organizaciones se están viendo superadas en materia de seguridad, y unos dos tercios de ellas tienen pensado implementar inteligencia artificial para reforzar su protección frente a las crecientes amenazas. Las tres principales conclusiones del estudio “Reinventing Cybersecurity with Artificial Intelligence: the new frontier in digital security” son:
La ciberseguridad basada en IA es imprescindible
El 56% de los directivos de las organizaciones reconoce que sus analistas de seguridad cibernética están desbordados por la cantidad de información y sistemas que deben proteger. Y se ven incapaces de enfrentarse con la suficiente rapidez al creciente volumen y la mayor complejidad de los ciberataques. Esto se está viendo especialmente en las amenazas dirigidas a las aplicaciones sujetas a exigencias temporales, que han aumentado una media del 16% para un 42% de los encuestados.
También en los ataques automatizados, que solo pueden ser contrarrestaos por la velocidad que proporcionan las máquinas y que han crecido una media del 15%, como declaró un 43% de los encuestados. Por ello, el 69% de las empresas cree que no puede hacer frente a estos problemas sin la ayuda de la inteligencia artificial aplicada a la seguridad, y un 61% afirma que es una tecnología crítica para identificar las amenazas críticas. Esto es un problema que en 2018 ha costado más de 50 millones de dólares para un 20% de los encuestados.
Los directivos están acelerando la inversión en IA
Con las graves consecuencias que tienen muchas de las amenazas de ciberseguridad los directivos de las empresas están dándose prisa en implementar nuevos sistemas inteligentes para proteger a la organización. Concretamente, el 64% reconoce que así pueden reducir el coste de la detección de brechas de seguridad, logrando una reducción del 12%. El 74% afirma que esta tecnología les permite acortar los tiempos de detección, reparación y aplicación de parches de seguridad en un 12%. Y un 69% también señala que la IA ofrece una mayor precisión, y el 60% cree que se aumenta la eficiencia del trabajo de los analistas de ciberseguridad, gracias a que se reduce la tasa de falsos positivos, aumentando la productividad.
Por ello, el 48% de los encuestados afirma que los presupuestos para IA en ciberseguridad crecerán un 29% para el año 2020. Mientras tanto, el 73% ya está probando esta tecnología, cuando antes de 2019 solo una de cada cinco empresas se había embarcado en esta evolución. Y se prevé que para el año que viene el 63% de las empresas desplegará la IA en sus sistemas de ciberseguridad.
Existen barreras importantes que limitan la implementación de la IA
La principal brecha que deben salvar las organizaciones para desplegar efectivamente la IA en el campo de la ciberseguridad es la dificultad de trasladar los casos de uso de sus pruebas de concepto a toda la organización, como indica el 69% de los entrevistados en este estudio. Según dijo Geert van der Linden, responsable del área de Ciberseguridad del Grupo Capgemini, “Las organizaciones se enfrentan a un volumen sin parangón de ciberamenazas de gran complejidad y se han dado cuenta de la importancia de la IA como primera línea de defensa”.
Señaló que “Los analistas en materia de seguridad están desbordados y casi una cuarta parte de ellos declara que no es capaz de analizar con éxito todos los incidentes identificados, por lo que es fundamental que las organizaciones incrementen su inversión y se centren en los beneficios que la IA puede aportar a sus empresas mejorando sustancialmente su ciberseguridad”.
Otro problema que enfrentan las organizaciones es la integración de la IA en sus infraestructuras, sistemas de datos y aplicaciones actuales. Aunque los expertos de las empresas saben lo que necesitan de la IA, solo el 54% de ellos ha sido capaz de identificar las series de datos que se requieren para que los algoritmos de IA sean efectivos.
Para Anne-Laure Thieullent, responsable de AI & Analtytics de Capgemini, “Las organizaciones deben dirigir primero sus esfuerzos a resolver los problemas subyacentes de implementación que impiden que la IA alcance todo su potencial de ciberseguridad. Esto significa crear una hoja de ruta para la eliminación de las barreras principales y centrarse en los casos de uso que más fácilmente puedan aplicarse en toda la organización, y que ofrezcan los mejores resultados. Las empresas deben seguir estos pasos si quieren estar preparadas para hacer frente al ritmo de cambio constante de las amenazas cibernéticas. De ese modo, ahorrarán dinero y reducirán la probabilidad de una violación devastadora de la seguridad de sus datos”.