Europa estará en el foco de la ciberseguridad en 2019

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Según muestran las previsiones publicadas por Forrester, en 2019 Europa se convertirá en un importante foco para los ciberataques, por lo que los CSIOs deberían impulsar nuevas y más efectivas estrategias de seguridad cibernética. Recomiendan potenciar el talento en esta materia y reforzar la protección de dispositivos, redes e infraestructuras críticas.

La consultora Forrester acaba de publicar un listado de predicciones sobre el panorama de la ciberseguridad de cara a 2019, que centra la atención en la situación de Europa como región estratégica donde se podrían concentrar gran parte de los ciberataques durante el año que viene. Por un lado, indica que la guerra comercial entre Estados Unidos y China generará un aumento del espionaje económico en Europa, ya que se está convirtiendo en uno de los campos de batalla de lo que ya se considera como una guerra fría económica. Según Forrester, el 41% de los responsables de la toma de decisiones de seguridad en la región señalan como una de sus principales preocupaciones los riesgos que supone la tensa situación geopolítica entre ambos países.

Además, este informe comenta la evidente relación entre las principales áreas industriales en las que China enfocó su 11º plan de inversión de cinco años y las que fueron atacadas mediante hacking por agentes estatales en 2015. Y alerta de que las informaciones aportadas por quienes han leído el 12º plan indican que determinadas industrias europeas se encontrarían en el foco de próximas amenazas cibernéticas. Concretamente apunta hacia las fábricas de nuevos vehículos eléctricos de Alemania, Francia y Reino Unido, a la industria de energía de Suiza y Alemania y al sector aeroespacial aeroespacial de Francia, Reino Unido e Italia.

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Por otro lado, Forrester aconseja a los CISO de empresas europeas que centren sus medidas de seguridad en la protección de la propiedad intelectual a partir de 2019, ya que los ciberdelincuentes están muy interesados en el robo de desarrollos tecnológicos y en la violación de seguridad de las nuevas infraestructuras de redes y dispositivos inteligentes. Debido al creciente volumen de datos y de dispositivos conectados la información sensible estará más al alcance de los delincuentes, en parte porque las empresas y la administración manejarán muchos datos confidenciales y su seguridad será puesta a prueba constantemente por los ciberdelincuentes. A esto se suman las dificultades para mantener el cumplimiento con las normativas de protección de datos y las buenas prácticas de seguridad de la información.

Según Forrester, otro factor a tener en cuenta en la aparentemente débil protección de las empresas europeas es la escasez de talento en materia de seguridad. Analistas y expertos vaticinan que, en los próximos años, las empresas europeas se verán en dificultades para contratar al personal de seguridad necesario para afrontar los futuro retos de seguridad. Pero ciertas voces del sector señalan que existe un importante talento subyacente en seguridad, compuesto por jóvenes y mujeres con formación avanzada, que deberían incorporarse a la fuerza laboral de las empresas europeas. En este sentido, los expertos esperan que para 2020 el 20% de los CSIO serán mujeres, aportando una mayor diversidad y nuevas perspectivas y enfoques de seguridad que enriquecerán las estrategias de protección de datos.