El robo de contraseñas ha aumentado un 60% durante el primer semestre

  • Seguridad

Las cifras aportadas por Kaspersky Lab indican que durante los seis primeros meses del año casi 1 millón de usuarios han sufrido el robo de sus contraseñas, un aumento interanual del 60%. Esto muestra cómo los ciberdelincuentes están mejorando sus tácticas, aprovechando el gran aumento del uso de servicios online para robar datos personales.

Mientras en el primer semestre de 2018, Kaspersky Lab detecto el robo de contraseñas a 600.000 usuarios, una cifra que entre enero y junio de 2019 ha aumentado un 60% hasta 940.000. Este incremento responde a que los ciberdelincuentes ven un gran potencial en el robo de credenciales de usuarios, que les da acceso a la gran cantidad de datos personales que incluyen en sus perfiles de servicios digitales.

Según dijo Alexander Eremin, investigador de seguridad de Kaspersky, “Los consumidores son cada vez más activos online y es normal que confíen en internet para llevar a cabo muchas tareas de su día a día. Sus perfiles digitales se llenan con cada vez más datos y detalles, convirtiéndose en un objetivo lucrativo para los delincuentes, ya que sus datos pueden monetizarse de muchas maneras distintas”.

Esto se debe a que, a partir de las contraseñas, los delincuentes pueden acceder a datos lucrativos, como las tarjetas de crédito o la información financiera de los usuarios. Además, esto puede ser la vía de entrada a los sistemas digitales de las empresas en que trabajan, lo que proporciona enormes oportunidades de robar datos verdaderamente valiosos.

Para prevenir estos riesgos, los expertos de Kaspersky Lab recomiendan a los usuarios que empleen sistemas de almacenamiento seguro de contraseñas y credenciales. Afirman que, con estas tecnologías, “los consumidores pueden utilizar sus servicios online favoritos con la confianza de que su información no correrá peligro. Esto se debería completar, además, con la instalación de una solución de seguridad; conviene extremar las precauciones”.

El robo de credenciales ha aumentado especialmente en Europa y Asia, y los expertos recomiendan proteger los equipo y dispositivos que se emplean para acceder a los servicios y aplicaciones digitales, y muy especialmente si también se usan para trabajar. Porque, una vez robada una contraseña de acceso, se puede acceder con más facilidad a otras credenciales, incluidas las de uso profesional, que en muchos casos son las mismas que las personales.