Las compras se vuelven sociales, superando el billón de dólares en ventas anuales

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Con una expectativa de 5.000 millones de usuarios de redes sociales en todo el mundo en 2023, el mercado del comercio social está creciendo más rápido que el comercio electrónico tradicional, y no muestra signos de desaceleración. La mayoría de las plataformas sociales ya se están beneficiando del éxito de los influencers para vender a sus audiencias.

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El feed de las redes sociales es el nuevo escaparate. Deloitte Global predice que el mercado del comercio social superará un billón de dólares a nivel mundial en 2023, lo que supone un crecimiento medio anual de aproximadamente del 25%. Una cifra más que razonable teniendo en cuenta las tendencias de crecimiento pasadas y la continua dependencia de todo lo móvil y digital, impulsado por las compras de los más de 2.000 millones de personas que se espera compren en una plataforma de redes sociales en 2023.

Impulsado inicialmente por el aumento de su popularidad durante la pandemia de la COVID-19, el mercado del comercio social continúa expandiéndose a pesar de los flujos y reflujos de la pandemia. Una investigación de 2021 muestra que alrededor de un tercio de los consumidores estadounidenses habían realizado una compra directamente en las redes sociales, y una proporción aún mayor dijo que ver un producto en las redes sociales era parte de su viaje de compra.

Detrás de todo este crecimiento está el surgimiento de millones de "influencers" o "creadores" que usan su influencia para promover, anunciar y vender productos a sus audiencias. Estas personalidades online tienen alcance global: en muchos países, incluidos Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Brasil y Japón, al menos el 60% de las personas dicen seguir a personas influyentes.

Los Millennials dominan actualmente el mercado del comercio social. Pero no debe pasarse por alto la maduración de muchos Gen Z a una edad en la que muchos tienen más dinero para gastar. La Generación Z es la cohorte generacional más grande del mundo, representando más del 30% de la población mundial, y la mayoría de esta floreciente generación de nativos digitales tiende a ser todo social, todo online, todo el tiempo. En el futuro, se espera que la Generación Z continúe estando online, donde continuarán recibiendo anuncios hiperdirigidos y personalizados para los productos que desean y necesitan, directamente de los influencers que ya conocen y aman.

En resumen, el ecosistema de comercio social en expansión está lleno de oportunidades para marcas, plataformas sociales y desarrolladores por igual. Las marcas y las personas influyentes deben centrar sus esfuerzos en descubrir qué categorías de productos están maduras para el comercio social, así como en rastrear los cambios culturales en los comportamientos de los usuarios y las preferencias de compra.