Barcelona contará con un nuevo laboratorio para diseñar arquitecturas TI abiertas

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El hardware de código abierto se está convirtiendo en la opción elegida por muchas organizaciones, tanto empresas como instituciones académicas, que ven en esta modalidad de TI una forma más transparente, competitiva y económica de construir sus infraestructuras. Por ello están surgiendo nuevas iniciativas para fomentar su desarrollo, como el nuevo laboratorio colaborativo que abrirá sus puertas en el Centro de Supercomputación de Barcelona.

Se acaba de anunciar que el Centro de Supercomputación de Barcelona (BSC-CNS) va a acoger en el nuevo Laboratorio Europeo de Arquitecturas de Computación Abierta (LOCA). Esta iniciativa se centrará en el desarrollo de chips basados en hardware de código abierto, como RISC-V, OpenPOWER o MIPS, centrados e el ámbito de la supercomputación, con el fin de potenciar la creación de nuevas tecnologías de propiedad intelectual europea.

Según ha explicado el director del BSC-CNS, Mateo Valero, “será un laboratorio colaborativo que acogerá empresas, fundaciones e instituciones académicas que comparten la visión de que es necesario crear arquitecturas abiertas para garantizar la transparencia, la competitividad y la soberanía tecnológica”. Para ello pretende reunir a científicos e ingenieros informáticos tanto de empresas privadas como de instituciones académicas.

Según dijo Valero, este nuevo laboratorio supone “un paso más en nuestra filosofía de abrir camino en la creación de arquitecturas de supercomputación europeas, como hicimos en el pasado con el proyecto Montblanc, y como lo estamos haciendo actualmente en el proyecto European Processor Initiative”. Los impulsores de esta iniciativa han anunciado que la dirección del nuevo laboratorio estará a cargo del Doctor en Ingeniería Electrónica John D. Davis, exempleado de Microsoft Research.

Según ha comentado Davis, “Visualizamos un futuro abierto, que incorpore software y hardware de código abierto. LOCA es un mecanismo para extender el éxito de sistemas operativos de código abierto, como Linux, en el terreno del hardware”. Además, señaló que “ya no podemos confiar en que, como hasta ahora, los rendimientos de los procesadores sigan aumentando de manera exponencial por la ley de Moore. Para mejorar la eficiencia energética y el rendimiento de los sistemas futuros, tenemos que realizar el codiseño de hardware y software, con hardware y software de código abierto”.

Los creadores de este nuevo laboratorio tienen la intención de centrar sus esfuerzos durante los primeros cinco años del proyecto en el desarrollo de los componentes necesarios para crear los nuevos computadores exaescala de la Unión Europea. Esto servirá para sumar esfuerzos a las demás iniciativas europeas que pretenden sentar las bases tecnológicas de la nueva supercomputación en la región, basándose en desarrollos propios y en estándares abiertos que permitan una mayor colaboración.