Los líderes tecnológicos demandan una mejor regulación tecnológica

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En los últimos meses diferentes voces dentro de la industria tecnológica han comenzado a expresar su opinión a favor de una regulación sobre las actividades de los gigantes tecnológicos. El último en hacerlo ha sido Bill Gates, que afirma que ya es hora de que los gobiernos ejerzan un mayor control sobre las grandes firmas como Facebook o Google, ya que tienen una gran influencia sobre la vida de las personas.

El universo digital en el que se ha adentrado la sociedad está cobrando unas dimensiones casi inabarcables, ya que las personas, los negocios e, incluso, los gobiernos, están generando grandes cantidades de información mediante la interacción con las aplicaciones, las redes y los servicios digitales. Todos estos datos acaban muchas veces en manos de los gigantes tecnológicos vinculados a las redes sociales, las aplicaciones más populares y los servicios en la nube, lo que está generando problemas.

Algunos de los más importantes son la manipulación de la información, las fugas de datos y su uso indebido para todo tipo de actividades sin el conocimiento o el permiso expreso de las personas y las organizaciones que son sus legítimos propietarios. Los negocios vinculados a los datos crecen, pero no existe el suficiente control sobre ellos, algo que preocupa incluso a los líderes de algunas de estas empresas. Como ejemplo, el propio Mark Zuckerberg ha “pedido ayuda” para regular el sector en el que opera, dado que la información que se mueve en su plataforma Facebook se ha vuelto casi inmanejable para ellos, y por ello se han producido numerosos escándalos sobre su uso fraudulento o con fines de manipulación de la opinión pública.

Otras voces críticas con la falta de regulación de las actividades vinculadas a las nuevas tecnologías e internet ha sido el propio creador de la web, Tim Berners-Lee, que hace poco se manifestó a favor de que los usuarios puedan recuperar un mayor control sobre Internet. Ahora, el cofundador de Microsoft, Bill Gates, se ha sumado a las voces que piden una regulación para las actividades de las grandes tecnológicas, y ha dicho que los gobiernos deberían ayudar a regular estas empresas para que sus beneficios superen a sus efectos negativos.

En un encuentro reciente del Economic Club de Washington DC, Gates se mostró preocupado por la situación actual y, según ha informado la CNN, dijo que “La tecnología se ha vuelto tan central que los gobiernos tienen que pensar: ¿cómo afecta esto a las elecciones? ¿Cómo afecta al bullying?”. Además, puso el foco en ciertas actividades altamente sospechosas que se podrían controlar mediante una mayor regulación de las grandes empresas que gestionan los datos de la gente. Por ejemplo, el fraude financiero o el lavado de dinero de la droga.

Estas opiniones y preocupaciones son compartidas por cada vez más personas influyentes del sector tecnológico, incluidos los responsables de algunas grandes corporaciones internacionales, pero es complicado que se logren estos objetivos a corto o medio plazo. Pasos en este sentido son las nuevas leyes de protección de datos que se están aprobando en diferentes partes del mundo, cada vez más restrictivas. Pero las iniciativas que persiguen establecer un control más férreo sobre las actividades de las grandes tecnológicas están encontrando una fuerte oposición por parte de grupos de presión e, incluso, de los gobiernos de ciertos países, en los que la economía está cada vez más influenciada por este tipo de empresas.