La transformación digital avanza a pesar de los vientos en contra

Las encuestas realizadas por la consultora IDC en el mes de febrero muestran que las empresas han alterado sus estrategias de gasto en TI y sus perspectivas de transformación digital por causa del brote vírico. Los encuestados se mostraron cautelosos sobre el desarrollo y la duración de la epidemia, pero son más optimistas que los proveedores de tecnología, y el 70% estima que durará entre 3 y 6 meses. En este tiempo prevén una serie de impactos en las empresas, que son dificultades para visitar a los clientes, disminución en el rendimiento de las ventas a incapacidad para reanudar la producción.

Pero, al mismo tiempo, las empresas encuestadas perciben varios impactos positivos que se producirán a causa del virus, y que suponen una oportunidad que pueden aprovechar para avanzar en la transformación digital. Una de ellas es la mejora de la capacidad corporativa para el trabajo colaborativo a distancia, ya que esta situación dará una excusa a las organizaciones globalizadas para invertir en nuevas tecnologías de comunicaciones unificadas y colaboración.

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Otra es que aumentará el reconocimiento del valor que tiene la transformación digital y las tecnologías de la información entre los empleados, que encontrarán en ellas un gran apoyo para su trabajo diario, especialmente cuando se desarrolla a distancia. Finalmente, la tercera ventaja principal que perciben las empresas a raíz de la epidemia del coronavirus es que esta situación les permitirá adquirir capacidades de marketing online y de desarrollo de negocio.

Según la encuesta de IDC, el 52% de los CEO encuestados mantienen sus planes de crecimiento empresarial corporativo para este año, y solo un 14% va a cambiar sus planes, reduciendo su inversión entre un 5% y un 10%. Mientras tanto, el 65% de los usuarios industriales está desarrollando planes de trabajo a distancia, para que la fuerza laboral que no necesita estar en las fábricas pueda trabajar desde casa, y un 20% ya ha planeado la implementación del teletrabajo.

Aunque esto se enfrenta a un problema cultural, ya que la mayoría de las organizaciones no están acostumbradas a esta modalidad de trabajo, y tienen muchos temores sobre la pérdida de productividad. Además, se prevé un cierto impacto en el gasto en TIC de las empresas, que durante el primer trimestre del año ya se está retrasando, lo que probablemente afectará a las cifras anuales. Y, de nuevo, los proveedores de TIC son más pesimistas que los clientes industriales.

De cara al fin de la epidemia este mismo año, las organizaciones van a centrar sus estrategias de transformación digital en varios campos principales. Estos son la creación de nuevos sistemas de teletrabajo y colaboración empresarial, la exploración de nuevos modelos de negocio y puntos de crecimiento empresarial, la construcción de culturas y organizaciones digitales competitivas, la reducción de costos a través de la eficiencia operativa y la exploración de nuevos escenarios digitales en los que implementar 5G e IoT.