Nuevas tecnologías para ayudar en tratamientos de salud mental

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Al igual que está sucediendo en el sector de la atención sanitaria general, el segmento de gestión de la salud mental también está avanzando en la transformación digital, buscando nuevas formas de mejorar el diagnóstico y el tratamiento de pacientes de salud mental. El último estudio de Frost & Sullivan revela que este año el gasto en tecnologías de la salud para mejorar la gestión de la salud mental ascenderá a 1.400 millones de dólares, y un 75% de estas inversiones corresponderán al mercado estadounidense.

Chandni Mathur, analista senior de la industria de salud digital en Frost & Sullivan, comenta que “el lado positivo de la pandemia ha sido la realización de los beneficios y el despliegue de varias soluciones de salud digital para manejar la carga de las enfermedades crónicas. En consecuencia, los inversores han sido extremadamente optimistas sobre la salud digital, y esta área ha experimentado inversiones récord solo en la primera mitad de 2020”.

En su informe, F&S destaca las cinco tecnologías que tendrán más presencia en la industria de salud mental, y muchas de ellas ya se están usando en otros ámbitos de la salud. La primera es la telemedicina, que permite atender a muchos tipos de pacientes a distancia, garantizando que los pacientes pueden ser atendidos y asesorados sin necesidad de que acudan a un centro médico. Las previsiones son que solo en Estados Unidos el gasto en este tipo de tecnologías crecerá un 64,3% este año.

La segunda tendencia más importante para el sector es el uso de herramientas de participación del paciente, principalmente a través de portales web y Apps móviles. Este tipo de aplicaciones ayudan a que los pacientes puedan disminuir sus niveles de ansiedad y depresión, y los expertos aseguran que hay más de 10.000 apps orientadas hacia estos usos, aunque no todas se aprovechan adecuadamente.

En tercer lugar, está la analítica, que permite extraer conclusiones de los datos recopilados por los servicios de atención sanitaria y por los portales y aplicaciones móviles. Esto sirve para proporcionar una atención más personalizada, algo que se ve reforzado con la siguiente tendencia, que es el uso de inteligencia artificial. Esta tecnología abarca el uso de chatbots con IA, que sirven como apoyo a los pacientes i como fuente de información adicional para los terapeutas. Finalmente, los expertos destacan la realidad virtual, que se utiliza para crear entornos virtuales en los que se aplican conceptos como la gamificación para facilitar que los pacientes usen estas tecnologías.

En palabras de Mathur, “continuaremos viendo inversiones en telepsiquiatría y aplicaciones de atención médica que pueden recopilar datos de pacientes sobre su condición y resultados. Existe una gran demanda de soluciones basadas en plataformas más holísticas y escalables. La capacidad de los proveedores para demostrar evidencia clínica y abordar el espectro completo, incluidas las afecciones de salud mental más complejas, será fundamental para el éxito. Además, la intervención tecnológica no puede ser un enfoque único para todos. Dado que cada paciente tiene una condición, un estatus social y un requisito únicos, los planes de tratamiento digitales personalizados serán importantes”.