Tecnologías emergentes que impulsarán la sostenibilidad

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El elevado precio de la energía, las regulaciones enfocadas a la lucha contra el cambio climático y otras tendencias relacionadas con la ecología están calando entre diferentes industrias. En este contexto están surgiendo varias tecnologías emergentes que ayudarán a cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible, y que verán una adopción temprana hasta el año 2025.

La sostenibilidad está abriéndose paso entre las estrategias digitales y de negocio de las empresas, impulsada por las nuevas regulaciones ambientales y el establecimiento de objetivos de desarrollo sostenible por parte de la comunidad internacional. Esto está dejando espacio para que surjan tecnologías emergentes enfocadas al aumento de la eficiencia energética y la reducción de la huella de carbono, que según los expertos de Gartner verán una rápida adopción para el año 2025.

En un informe publicado por la consultora, Annette Zimmermann, vicepresidenta de investigación, explica que, para detener el cambio climático la sostenibilidad medioambiental no puede ser responsabilidad solo de unas pocas industrias, sino que el establecimiento de negocios sostenibles debe ser una prioridad a nivel global. Opina que “la transición a una economía neta cero será tan disruptiva como la revolución industrial o la revolución digital, y requerirá nuevas tecnologías, modelos comerciales, estrategias y procesos”.

En este sentido, las investigaciones de Gartner apuntan a tres tecnologías que tendrán un papel decisivo en el cambio hacia una economía más respetuosa con el medio ambiente en los próximos tres años. Destacan que, para el año 2025, se producirá una adopción temprana de la sostenibilidad en la nube, la medición de la huella de carbono y el software avanzado de gestión de red. Esto ofrecerá interesantes oportunidades a los proveedores de tecnología y servicios que se enfoquen en apoyar a las industrias en su camino hacia la sostenibilidad.

Sostenibilidad en la nube

Este concepto se basa en el uso de servicios en la nube para impulsar la sostenibilidad dentro de los sistemas económicos, ambientales y sociales. Se trata de la operación y entrega sostenible de servicios cloud por parte de los proveedores de la nube, y en que los clientes hagan un consumo y uso sostenible de estos recursos. Zimmermann dice que “los servicios de nube pública ofrecen un gran potencial de sostenibilidad con su capacidad para centralizar las operaciones de TI y operar a escala utilizando un modelo de servicio compartido, lo que resulta en una mayor eficiencia informática”.

La demanda de servicios sostenibles por parte de las organizaciones sitúa a los proveedores de la nube en una posición ideal para invertir en capacidades de sostenibilidad, como el traslado de sus operaciones a regiones donde hay una mayor disponibilidad de energía renovable. Conscientes de ello, en los próximos tres años se verán presionados para adoptar una estrategia climática más transparente en materia de sostenibilidad y una hoja de ruta clara que convenza a los clientes y a las autoridades. Gartner pronostica que, para 2025, las emisiones de carbono de los proveedores de la nube hiperescala serán uno de los tres principales criterios de los clientes a la hora de decidir la contratación de un proveedor de servicios en la nube.

Medición de la huella de carbono

Este concepto define la cantidad de emisiones contaminantes generadas por la actividad humana y empresarial, que actualmente se basa casi completamente en el CO2 que se libera a la atmósfera, aunque existen otros gases con efectos, incluso más dañinos, como el metano, entre otros. Por su parte, la huella de carbono de un producto o servicio engloba tres alcances. El Alcance 1 es el de las emisiones directas de fuentes propias o controladas. El Alcance 2 las emisiones indirectas provenientes de la generación de energía comprada. El alcance 3 se refiere a todas las emisiones indirectas, incluidas las de Alcance 2, relacionadas con toda la cadena de valor de una organización, incluidas las provenientes de aguas arriba y aguas abajo.

Como explican en Gartner, la huella de carbono de Alcance 3 es la más complicada de reducir, pero en algunas industrias puede representar hasta el 95% del total. Esto está impulsando la adopción de tecnologías enfocadas a la medición precisa de la huella de carbono entre muchas industrias. Esta tendencia irá acentuándose a medida que las industrias se interesen más en conocer y reducir sobre las emisiones de Alcance 3 y apliquen una mayor transparencia en sus informes de sostenibilidad.

Este progreso se apoyará en la proliferación de nuevos sensores ambientales IoT que permitirán conocer más en profundidad las emisiones generadas en las industrias, proporcionando más datos, de más calidad y precisión sobre la calidad del aire y otros parámetros relacionados con el impacto ambiental. Zimmermann dice que “en última instancia, todas las organizaciones tendrán que invertir en herramientas de medición de carbono. Las soluciones de software que brindan una medición de carbono transparente y consejos prácticos están experimentando una rápida adopción, y Gartner espera un crecimiento continuo a medida que avanzan las capacidades de integración”.

Software de gestión de red avanzada

Como explican los expertos de Gartner, esta tecnología engloba “el control de supervisión y adquisición de datos (SCADA), los sistemas de gestión de energía de servicios públicos y nuevas capacidades operativas en tiempo real que aprovechan los modelos físicos y de aprendizaje automático”. Esta tecnología está siendo usada cada vez más por los proveedores y gestores de suministro eléctrico, ayudando a monitorizar y controlar con más precisión los recursos energéticos en la red, y ayudando a mantener la estabilidad del suministro. Asimismo, contribuye a guiar la toma de decisiones de inversión en las infraestructuras, para maximizar el aprovechamiento del gasto de capital.

Según Gartner, actualmente entre el 5% y el 20% de las organizaciones están invirtiendo en software avanzado de administración de redes, y para el año 2025 el porcentaje crecerá sustancialmente. De cara a 2026 esperan que más del 60% de las inversiones de capital de las empresas energéticas más grandes se centrará en inversiones en energía renovable de bajo riesgo.

Zimmermann explica que “el principal desafío de los operadores de redes eléctricas es administrar la variabilidad del flujo de energía y la volatilidad del perfil de energía”. Por ello, cree que el software avanzado de gestión de la red contribuirá decisivamente a la transición hacia la generación de energía renovable, ayudando a las empresas de servicios públicos de energía a tomar un papel más activo en la administración de las redes, equilibrando mejor la inestabilidad generada por la intermitencia del flujo de energía renovable.