El mercado de la nube crecerá este año en Asia Pacífico
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A pesar de las turbulencias que enfrenta la economía global por la pandemia, el mercado de servicios en la nube está sacando partido a la digitalización forzosa de las organizaciones. Los expertos de IDC pronostican que este año, solo en Asia Pacífico, el gasto de las organizaciones en servicios de la nube pública crecerá en más de 8.500 millones de dólares.
A medida que los países y sus empresas avanzan en la recuperación económica post-COVID, los proveedores de servicios en la nube están viendo un aumento de los ingresos. Este es el caso del mercado asiático que, como prevén los analistas de IDC, este año podría alcanzar unos ingresos de 34.510 millones de dólares, un aumento considerable desde los 25.980 millones de 2019. En su más reciente Guía de gastos de servicios de cloud pública mundial afirman que, además, el gasto de las organizaciones de Asia Pacífico en servicios privados de IaaS, PaaS y SaaS también crecerá este año.
En palabras de William Lee, director de investigación de Servicios en la Nube en IDC Asia / Pacífico, “a medida que las organizaciones hacen la transición a la nueva normalidad, la mayor demanda de servicios de nube pública se ha solidificado y es probable que se mantenga. Los países están saliendo del estado reactivo inmediato y están elaborando planes para la recuperación, con algunos países avanzando más rápido que otros. Se puede esperar un crecimiento moderado en todos los países, excepto en Nueva Zelanda, que generalmente permanecerá sin cambios”.
En su informe, los expertos de IDC también destacan que las interrupciones temporales que se produjeron en la cadena de suministro de hardware han ocasionado un aumento a corto plazo del gasto en IaaS vinculado a una nube privada virtual (VPC) proporcionada por hiperescaladores. Además, señala que el aumento del gasto en Software como Servicio se ha impulsado gracias a las soluciones de trabajo remoto y a los servicios de videoconferencia y colaboración.
Por otro lado, ponen énfasis en cómo la seguridad se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los clientes, convirtiéndose en una de las principales áreas de inversión de las empresas y, a pesar de que no supone un gran volumen de gasto, se ha convertido en un campo imprescindible. Como explica Lee, “la pandemia ha brindado oportunidades para que algunas organizaciones aprovechen los cambios en las condiciones operativas, y puedan identificar las debilidades de los proyectos que quieren entregar en las condiciones actuales”.