La demanda de ordenadores comienza a moderarse en la región de EMEA

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Tras muchos meses de crecimiento desmedido, el mercado de ordenadores de EMEA ha comenzado a relajarse en el segundo trimestre de este año, con cifras finales inferiores a lo previsto. La escasez de componentes clave está dejándose notar, y los clientes han disminuido la demanda en general, pero las ventas continúan aumentando y seguirán siendo positivas en el futuro cercano.

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El mercado tradicional de PC en la región de EMEA ha tenido un comportamiento similar al de otras economías desarrolladas, viendo un aumento sin precedentes en la demanda desde que comenzó la pandemia. Esta tendencia se ha mantenido durante el primer trimestre de 2021, pero en el segundo las ventas han comenzado a relajarse, y el índice de crecimiento interanual ha caído al 6,5%, dejando unas ventas de 22,2 millones de unidades, según las últimas cifras publicadas por la consultora IDC, que finalmente han sido más contenidas de lo previsto anteriormente.

Cabe destacar que el comportamiento ha sido similar en los segmentos de ordenadores de sobremesa y portátiles, que han visto un aumento de ventas del 6,2% y 6,6%, respectivamente. La recuperación de ventas de equipos de sobremesa se atribuye principalmente a los dispositivos para juegos, mientras que las ventas de portátiles se han ralentizado tras cuatro trimestres consecutivos de aumento, debido a la reducción de la base de clientes que necesitaban renovar equipos o sustituirlos por modelos más aptos para el teletrabajo. Los expertos señalan que los envíos siguen creciendo, pero aparentan ser más débiles al compararlos con el crecimiento explosivo que se ha producido durante la mayor parte de 2020.

Simon Thomas, analista de investigación de dispositivos de computación personal de Europa occidental de IDC, explica que “los problemas de suministro relacionados con una gama de componentes cruciales continúan limitando los envíos en el mercado de Europa occidental. Esto, combinado con la relajación parcial de los bloqueos y el regreso a la estacionalidad, ha desacelerado el rápido crecimiento observado en los últimos trimestres”.

A nivel regional, en Europa Occidental el segmento de consumo ha visto una reducción en la demanda, pero aun así las ventas han crecido un 18,6% interanual, llegando a 6,3 millones de unidades. Los segmentos de escritorio y de portátiles ha aumentado los envíos un 36,1% y un 15,5% interanual, respectivamente. Esto se atribuye a la priorización del cumplimiento de la demanda de los canales de consumo, gracias a que existe una mayor flexibilidad en la adopción de ordenadores personales de diferentes configuraciones, algo que no sucede en el segmento de PC empresarial.

En esta categoría las ventas se han reducido en un 0,8% interanual en estos tres meses, principalmente por el descenso de los equipos de sobremesa (-7,3%), que no ha podido ser compensado por el ligero crecimiento de los equipos portátiles (0,7%). Aunque IDC pronostica que se recuperarán las ventas en la segunda mitad de 2021, a medida que las empresas reintegren a los trabajadores a sus oficinas, ya sea en modalidad 100% presencial o mixta.

En Europa Central y Oriental (CEE) y en Medio Oriente y África (MEA) los envíos se vieron reducidos a causa de los problemas de suministro y por la escasez de componentes, dando como resultado un aumento interanual moderado de solo el 5,6% y del 7,7%, respectivamente. Nikolina Jurisic, directora asociada de investigación de IDC Europa, comenta que “en la región de Europa central y oriental, el segmento comercial registró una disminución de -1,8% interanual. Algunas de las ofertas de educación no se pudieron cumplir debido a problemas de disponibilidad, y se espera que se envíen más adelante en el año”.

Por su parte, el mercado de PC de consumo ha logrado mantenerse fuerte en CEE, creciendo un 11,1% con respecto al segundo trimestre de 2020. Juristic afirma que “l inventario en algunos países está mejorando, pero todavía está por debajo de la zona cómoda. Sin embargo, la región de MEA reportó resultados comerciales positivos del 16,1% interanual y el consumidor se mantuvo estable a nivel interanual”.