Frenos que limitan la adopción de la automatización robótica de procesos
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A pesar de que la automatización robótica de procesos ofrece numerosas ventajas a las empresas, su adopción está siendo más lenta de lo esperado por sus impulsores. Según un estudio reciente las causas son variadas, y tiene que ver tanto con la visión de los directivos como con la falta de preparación en los entornos y el personal TI, y con la identificación de los casos de uso adecuados, lo que permite extraer el verdadero potencial de la automatización.
La automatización robótica de procesos (RPA), en esencia, se basa en software capaz de realizar tareas repetitivas de forma autónoma, basándose en reglas predeterminadas diseñadas por sus administradores. Esto libera a los trabajadores de estos trabajos productivos pero insatisfactorios, permitiéndoles dedicarse a otras cosas que requieren capacidades más personales. La principal ventaja de la automatización robótica de procesos es que mejora la eficiencia mediante la aceleración de determinados trabajos, lo que conlleva una mejora operativa y una reducción de costes, que en algunos casos es muy significativa. Pero aún así, el software RPA no está avanzando tan deprisa como proveían sus impulsores, una situación algo que tiene sus raíces en varios factores.
Para comprender mejor la situación, la consultora Deloitte ha realizado una encuesta para buscar las barreras que están retrasando la adopción de las soluciones RPA. Uno de los datos curiosos de este estudio es que muchas empresas ya están usando RPA en su organización, pero en la mayoría de los casos esta innovación se mantiene dentro de los límites de proyectos de prueba, sin que se perciba completamente el potencial que tienen en otras áreas de la organización. Esto a pesar de que los trabajadores que pueden experimentar con las soluciones RPA se sienten muy satisfechos con el resultado.
Aunque los responsables de estos proyectos están luchando por escalar las soluciones RPA y llevarlas a otros ámbitos del negocio, en este proceso se están encontrando con oposición dentro de sus organizaciones. La principal barrera a derribar es la complejidad que supone expandir estas soluciones de forma fragmentada para proporcionar automatizaciones centradas en áreas individuales y separadas. Además, los expertos indican que hay tres fases que se deben superar para lograr una adecuada implementación de la automatización robótica de procesos. La primera es asegurarse de que los directivos de la organización tienen una visión estratégica de lo que supone la automatización y de lo que puede proporcionar. En muchos casos es este grupo el que limita la adopción o la expansión de las soluciones RPA, ya que no conocen las ventajas que proporciona, lo que les impide entender hasta qué punto puede ser un camino estratégico de cara al futuro del negocio.
La segunda es involucrar al equipo de TI de la organización en este cambio, ayudándoles a comprender las ventajas que proporciona la automatización, especialmente en su entorno. Esto es vital, ya que este equipo puede convertirse en uno de los mayores opositores a la implementación de RPA, suponiendo un freno importante en este avance. Por último, los expertos de Deloitte indican que es preciso identificar los casos de uso y su vinculación directa con el negocio, pero pensando más allá del mero beneficio económico, ya que las soluciones RPS proporcionan otras muchas ventajas menos tangibles para la organización, y no deben pasarse por alto. Porque en muchos casos la ausencia de un beneficio económico verdaderamente sustancioso puede frenar la adopción de software de automatización robótica de procesos, impidiendo que la organización obtenga ventajas competitivas adicionales que podrían ser vitales para el futuro del negocio, especialmente en sectores muy vinculados a los modelos de negocio basados en el dato y en lo digital.