La colaboración inmersiva revolucionará los espacios de trabajo del futuro
- Puesto de trabajo
Muchas empresas están cambiando radicalmente sus espacios y modelos de trabajo, adoptando nuevas tecnologías para impulsar la colaboración y adoptando el trabajo híbrido. En la mayoría de los casos esta transformación no tendrá vuelta atrás, sino que seguirá evolucionando con la introducción del metaverso y de herramientas enfocadas a la colaboración inmersiva, cuya adopción se irá expandiendo durante esta década.
La pandemia ha obligado a muchas empresas a adoptar el teletrabajo para seguir funcionando sin poner en riesgo a sus empleados, un modelo laboral que ha funcionado relativamente bien. Pero no todas las personas se adaptan bien a esta fórmula, lo que ha llevado a las organizaciones a cambiar a un modelo híbrido. Esto permite reducir el espacio necesario en sus oficinas y el coste derivado de tener un puesto de trabajo siempre operativo para cada empleado, manteniendo unas condiciones de conciliación que las personas valoran muy positivamente.
Al mismo tiempo se han implementado nuevas herramientas que facilitan la comunicación y la colaboración entre trabajadores y con los clientes, una tendencia que, como el trabajo híbrido, ha llegado para quedarse. Pero todos estos cambios son solo el inicio, ya que están llegando innovaciones que revolucionarán la forma de trabajar en el futuro en muchas profesiones. El desarrollo de las tecnologías de realidad virtual y aumentada y la irrupción del metaverso habilitarán nuevas formas de colaboración inmersiva que están generando un interés creciente en diferentes industrias, y su penetración en los espacios de trabajo aumentará a lo largo de esta década.
Según una investigación realizada por ABI Research, el mercado de colaboración inmersiva y servicios relacionados se irá expandiendo hasta alcanzar un valor de 22.000 millones de dólares para el año 2030, cuando podría representar el 35% del total, incluyendo software y servicios, colaboración de vídeo dedicada y hardware. Aunque a corto y medio plazo el auge de la colaboración se desinflará con el regreso de los trabajadores a las oficinas, en muchos casos este será parcial y seguirán utilizándose las plataformas de colaboración de forma regular en muchas empresas, y no se espera volver al estado anterior a la pandemia.
Como explica Michael Inouye, analista principal de Metaverse Markets & Technologies en ABI Research, “cuando escuchamos sobre el metaverso, muchos pensamientos se trasladan directamente a mundos 3D profundamente inmersivos y a una forma dramáticamente diferente de interactuar con el contenido, los servicios y el trabajo. Si bien esta visión a largo plazo podría algún día hacerse realidad, hay pasos y transformaciones importantes que deben ocurrir antes de que lleguemos a ese futuro”.
Opina que es importante dejar a un lado las posibilidades futuras que actualmente promete el metaverso y analizar poco a poco cómo va evolucionando este concepto a lo largo del tiempo, ya que en este camino surgirán nuevas capacidades y otras probablemente quedarán en el olvido. Por ello, las empresas interesadas en adoptar estas tecnologías para impulsar la colaboración deben buscar soluciones para sus necesidades, poniendo el foco en la productividad y la flexibilidad que puede ofrecer la colaboración inmersiva. Actualmente la colaboración de vídeo está llevando a la construcción de salas de vídeo y reunión dedicadas, pero actualmente la penetración de estos espacios de trabajo habilitados para vídeo representa solo un 10% de las salas de reuniones.
Frente a esto, la colaboración inmersiva puede ofrecer soluciones que no requieran estos espacios específicos, sino hardware y aplicaciones que puedan utilizar los empelados en su propio puesto de trabajo. Por el momento este concepto y las tecnologías relacionadas están en sus primeras etapas de desarrollo, y queda mucho camino que recorrer hasta ver si se popularizará, pero las perspectivas son muy interesantes.
Como ejemplo, Inouye cita la plataforma Omniverse de Nvidia, que está demostrando capacidades revolucionarias a través de las simulaciones y la interoperabilidad entre aplicaciones, mejorando los flujos de trabajo. Y destaca que se está viendo un impulso general hacia la interoperabilidad y el soporte para aplicaciones de terceros, algo que todavía no se está dando en el espacio enfocado al consumidor.
En su opinión, uno de los factores que cambiará completamente las reglas de juego en lo que se refiere a la colaboración inmersiva es la próxima llegada de gafas inteligentes más económicas y funcionales, dispositivos que facilitarán la adopción de plataformas de colaboración inmersiva, modernizando la conectividad, mejorando el rendimiento y ampliando la variedad de servicios al alcance de las empresas y los consumidores.